El cantante español Raphael Martos demostró que es uno de los grandes de la música y que posee la misma potencia vocal que cuando visitó la isla por primera vez hace décadas.
Al vozarrón de El Ruiseñor de Linares se le sumaron en el escenario del Coliseo de Puerto Rico, en Hato Rey, San Juan, su imponente presencia escénica y el carisma, logrando así provocar todo tipo de emociones en su fiel fanaticada, que llenó el primer nivel del recinto.
El concierto Te llevo en el corazón comenzó a las 5:12 de la tarde de hoy, domingo con una estrofa a capella del tema Ahora. Sin perder tiempo, Martos entonó La noche, Mi gran noche –en la que la audiencia le hizo coro– y Digan lo que digan, revalidando que es un artista con vocación y que ha podido trascender generaciones.
Con la atmósfera ideal en el recinto, Raphael incluyó en su repertorio los tangos La cumparsita, A media luz, Caminito, En esta tarde gris, Nostalgias y Uno.
El solista realizó una presentación especial para el tango Volver, durante el que, gracias a la tecnología, entonó versos a dúo con el inolvidable Carlos Gardel.
Ante una conmovida audiencia, el cantante desempolvó Hablemos del amor, que calificó como otra “joya de la corona” en sus 50 años de impecable trayectoria.
El protagonista del espectáculo prendó a sus seguidores con Estuve enamorado, Cuando tú no estás, Desde aquel día –que calificó como su joya consentida– y Yo sigo siendo aquel, con el mismo magnetismo del primer día que las interpretó.
En la melodía Yo sigo siendo aquel, el vocalista alteró la letra para decir: “Yo sigo siendo aquel, el mismo… el Raphael de siempre”, contando con la aceptación de un fervoroso público.
En Maravilloso corazón, asimismo, Raphael se “saboreó” el escenario y contempló a los espectadores, entre los que se encontraban el ex gobernador Rafael Hernández Colón y la cantante y ex legisladora Ruth Fernández.
Los boleros Tres palabras, Adoro, Voy, Usted, Encadenados y Tú me acostumbraste tocaron la fibra más íntima de los asistentes, quienes quedaron extasiados frente a su ídolo.
Frases como: “¡Te amamos, Raphael!” y “¡Raphael, tú eres mío!” se escucharon en voz de señoras antes de Amor mío.
Los fanáticos intentaron comprobarle al artista que recordaban la letra de Estar enamorado y, al fallar, quedaron emplazados para que se la aprendieran totalmente para el próximo año.
Los corazones se agitaron aún más con Para volver a volver, Un día más, En carne viva y el clásico Escándalo.
El concierto estuvo compuesto por 40 temas. Raphael deleitaría con un segmento de rancheras y éxitos como Ámame y La fuerza del corazón.
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